Willkommen.

Era uno de esos días en los que estaba aburrido, la noche de ayer se pasó escribiendo en sus memorias lo fantástico que era, se había encontrado con algunas personas y decidieron comer en su casa, estaba de pie en la puerta donde sería la pequeña reunión.

-Tsk...quizá deba de limpiar un poco.- Se dijo asi mismo, mientras se rascaba la cabeza pensando que hacer.

Quizá había llegado un tanto temprano a la reunión, porque se escuchaba muy silencioso el lugar y en donde hay una reunión se puede esperar de todo... menos silencio... y mucho menos considerando los invitados y aún más el dueño de la casa, suspiró levemente y tocó la puerta.

-hola? soy yo...

Se sorprendió un poco, desvió la mirada hacia el reloj, y aun no era la hora, como pudo barrió todo lo que habia a su paso, no le importó si llevaba entre eso los libros de west.

-Voy...!.-

-ok, ok, espero....

susurró para si mismo esperando que el otro abriese la puerta, solo esperaba que no le dejara esperando como idiota por largos minutos, si lo hacía le diría hasta de lo que se iba a morir....

Metió unas cosas debajo del sillón, y abrió la puerta, mirando al menor de cabello castaño quien esperaba fuera.

-Oh, tomato boy keseseses.-

Su mechoncito se movió un tanto alterado y su ceja tuvo un leve tic de molestís debido al sobrenombre recién dado por el otro, aun así forzó una sonrisa e intentó ser amable.

-hola.... un placer verte....

De la nada, se le vió al albino abrazandole, haciendole una especie de llave en su cabeza.

-Muahahaha! ¿Listo para ser violado...digo, para comer?.-

-que!? oye! sueltame!

Lo separó un poco de él y se acomodó mejor, viendolo con algo de desconfianza.

-dijiste violar?

-Keseses era broma tomato boy.-

Caminó dentro indicandole con un gesto de la mano que pasara.

Se lo pensó tan solo unos segundos antes de entrar a la casa ajena, después de todo quizá si era una broma, después de todo solo tenía que ver de quien venía el comentario.

-nunca había estado en tu casa...

comentó viendo todo lo que había alrededor.

Con su pie izquierdo apartaba una ocacional corbata que se le había olvidado, giró a ver al Italiano.

-¿Eh? ah, si keseses ¿No es genial? el viejo fritz la hizo durante su reinado.-

-eh.. si, lo que digas...

Realmente no le prestó mucha atención a lo que decía, estaba más ocupado observando (criticando mentalmente) todo lo que había en aquel lugar.

Caminaba cuidadosamente sobre algunas cosas que se la habia olvidado, pateandolas bajo el sillón, hasta que se golpeó con la pata de este.

-Ahhh!!! demonios, eso me dolió!.-

Volteó a verlo y al verlo que se había golpeado rió sonoramente y sosteniendose el estómago.

-jajajajaja serás idiota!! jajajajaja que imbécil se golpea con la pata del sillón!? jajajajajaja

Escuchó las risas del Italiano, haciendo que le siguiera el juego en cierta forma.

-Muahahaha me golpeo genial, keseses!.-

Habia estado ese dia paseando, admirando los lugares, no solia salir de su casa o de la mansion de Austria, pero habia oido de una invitacion a comer, estaba ansioso por probar algo que no fuera la comida gourmet de la casa del Austriaco, miro hacia arriba el timbre, pero... su estatura no le dejaba tocarlo -mmm...- toco la puerta para ver si alguien le abria.

Escuchó como la puerta era tocada con suavidad, sabía que había alguien ahí afuera, sin embargo su acompañante y dueo de la casa parecía no darse por aludido.

-no vas a abrir la puerta, idiota?

Le preguntó con algo de fastidio, sin embargo al no recibir respuesta alguna (inmediata) por parte del otro se dirigió a la puerta y abrió la misma.

-quién? -preguntó viendo a todos lados- estúpidos niños, no es nadie! -dijo molesto al no ver a nadie al alcance de su vista.

(XDD)

-Hey! como que nadie? Soy el Gran Sacro Imperio Romano!- se cruzo de brazos con el ceño fruncido, esperando que este bajara la mirada para notarle y le dejara entrar

-eh?

Bajó la vista, encontrando frente a él al Sacro Imperio Romano, sonrió sárcasticamente y volteó a ver hacia dentro de la casa en busca de prussia.

-ah! si hay alguien, aunque debería decir la mitad de alguien? es solo SIR

-Compermiso- entro a la casa mirando las cosas algo desordenadas, solo se limito a mirar al Italiano que le guiaba adentro haciendo referencia a su altura -No debes burlarte de mi! yo pronto crecere, solo es cuestion de tiempo-

espiando desde la ventana principal de la casa de gilbert, resistiendo el impulso de entrar y obligarlo a limpiar todo el mugrero k había escondido debajo de los sillones. Además no la había invitado...bueno k ella supiera no. Pero igual se quedaría ahí hasta k lo viera pasarse de listo con alguien.

España: toca la puerta de la casa de prussia... y como ve k no le abren se mete como por su casa...